QUIEN ES CRISTOBAL LOPEZ

Protesta. Los despedidos del casino lo caricaturizaron.

Por Rodrigo Alegre

Nació en Chubut, hizo fortuna en Santa Cruz y ya se expandió a Brasil
A los 19 años estaba vinculado familiarmente al negocio del transporte de cargas y años después conoció a los Kirchner por una licitación para la ciudad de Río Gallegos. Hoy tiene negocios petroleros en Santa Cruz y Chubut y esta semana se conoció que en Brasil adquirió 43 bloques de exploración. Posee, al menos, 16 casinos en todo el país.

Cristóbal Manuel López, el nuevo zar del juego, recordará siempre diciembre de 2007. El miércoles 5 de ese mes el ex presidente Néstor Kirchner le extendió por 15 años más la concesión de las máquinas tragamonedas instaladas en el Hipódromo Argentino de Palermo. El miércoles 26 del mismo mes, sólo un día después de la navidad, el gobernador ultrakirchnerista, José Luis Gioja, anunció que la petrolera OIL S&M, también propiedad de López, había hallado en el desierto de San Juan un pozo de crudo.

Cristóbal López apostó, desde siempre, a la diversificación. Actualmente, cubre casi todos los rubros más beneficiados por el modelo económico kirchnerista. Tiene dos medios de comunicación en la provincia de Chubut, una empresa productora de aceite de oliva, una firma abocada a la exploración de petrolera internacional, una compañía de recolección de residuos y una sociedad comercial llamada Lejano Sur SRL, recientemente creada, para la comercialización de indumentaria.

Sin embargo, el millonario negocio de las máquinas tragamonedas hizo famoso su apellido. López tiene el 30 por ciento de la firma Casino Club SA, que, hoy, opera las máquinas de juegos de azar en los casinos de las provincias de Misiones, La Pampa, Mendoza, La Rioja, Tierra del Fuego, Santa Fe, Tucumán y Santa Cruz.

A mediados de 2007, el empresario kirchnerista se asoció con la firma española CIRSA S.A. para la explotación comercial del Casino Flotante de Puerto Madero. Esa incipiente sociedad estuvo plagada de conflictos desde el comienzo: los trabajadores de las dos barcazas acusaron al socio argentino de haber lanzado un lock-out patronal para lograr que los trabajadores sean relocalizados en el sindicato de trabajadores marítimos. Finalmente, después de varios enfrentamientos, la jueza federal María Servini de Cubría clausuró el Casino Flotante por los constantes disturbios. Cristóbal López apenas sintió un leve cosquilleo por el cierre. “Gran parte de los apostadores se fueron al Hipódromo y a otros bingos de su propiedad”, sostuvo un hombre del grupo que pidió no revelar su nombre.

Aunque López no es un santacruceño, su incalculable fortuna se incrementó gracias a la urdimbre de relaciones tejida con los funcionarios pingüinos. Fue el entonces gobernador Néstor Kirchner quien le extendió sus primeros dos permisos para explotar los emprendimientos de juegos de azar en Puerto Deseado y Pico Truncado. Hoy, las sucursales se extienden hasta El Calafate y Las Heras.

Cristóbal López nació en Comodoro Rivadavia y con apenas 19 años se involucró en el negocio del transporte de cargas, una legado que heredó de sus padres. La firma, recordada en Chubut, mantuvo durante años un contrato con la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF).

En Tucumán, la instalación de mil tragamonedas se convirtió en un escándalo en la Legislatura que rozó al gobernador José Alperovich.

López genera controversia a un lado y otro de la frontera. Esta semana el periódico brasilero Valor Económico resaltó que el grupo OIL M&S, controlado por el millonario santacruceño, adquirió 43 bloques de exploración de gas y petroleo. Desde el gobierno de Inácio Lula Da Silva señalan a Cristóbal López como un empresario vinculado a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.

DIARIO PERFIL 03/02/2008